César Vallejo: España, aparta de mí este cáliz (XV)

Niños del mundo,
si cae España —digo, es un decir—
si cae
del cielo abajo su antebrazo que asen,
en cabestro, dos láminas terrestres;
niños, ¡qué edad la de las sienes cóncavas!
¡qué temprano en el sol lo que os decía!
¡qué pronto en vuestro pecho el ruido anciano!
¡qué viejo vuestro 2 en el cuaderno!

¡Niños del mundo, está
la madre España con su vientre a cuestas;
está nuestra madre con sus férulas,
está madre y maestra,
cruz y madera, porque os dio la altura,
vértigo y división y suma, niños;
está con ella, padres procesales!

Si cae —digo, es un decir— si cae
España, de la tierra para abajo,
niños ¡cómo vais a cesar de crecer!
¡cómo va a castigar el año al mes!
¡cómo van a quedarse en diez los dientes,
en palote el diptongo, la medalla en llanto!
¡Cómo va el corderillo a continuar
atado por la pata al gran tintero!
¡Cómo vais a bajar las gradas del alfabeto
hasta la letra en que nació la pena!

Niños,
hijos de los guerreros, entre tanto,
bajad la voz que España está ahora mismo repartiendo
la energía entre el reino animal,
las florecillas, los cometas y los hombres.
¡Bajad la voz, que está
en su rigor, que es grande, sin saber
qué hacer, y está en su mano
la calavera, aquella de la trenza;
la calavera, aquella de la vida!

¡Bajad la voz, os digo;
bajad la voz, el canto de las sílabas, el llanto
de la materia y el rumor menor de las pirámides, y aún
el de las sienes que andan con dos piedras!
¡Bajad el aliento, y si
el antebrazo baja,
si las férulas suenan, si es la noche,
si el cielo cabe en dos limbos terrestres,
si hay ruido en el sonido de las puertas,
si tardo,
si no veis a nadie, si os asustan
los lápices sin punta, si la madre
España cae —digo, es un decir—,
salid, niños, del mundo; id a buscarla!…

Tumba de César Vallejo en Montparnasse, París. Fotografía de J.F.R.

Tumba de César Vallejo y su mujer Georgette, en el Cementerio de Montparnasse, París. Fotografía de J.F.R.

Imprescindibles (V)
Extraído de César Vallejo, Obra poética completa 
(Madrid: Alianza Literaria, 2006)

Nombre verdadero, por Yves Bonnefoy.

VRAI NOM

Je nommerai désert ce château que tu fus,
nuit cette voix, absence ton visage,
et quand tu tomberas dans la terre stérile
je nommerai néant l’éclair qui t’a porté.

Mourir est un pays que tu aimais. Je viens
mais éternellement par tes sombres chemins.
Je détruis ton désir, ta forme, ta mémoire,
je suis ton ennemi qui n’aura de pitié.

Je te nommerai guerre et je prendrai
sur toi les libertés de la guerre et j’aurai
dans mes mains ton visage obscur et traversé,
dans mon cœur ce pays qu’illumine l’orage.

***

NOMBRE VERDADERO

Yo nombraré desierto el baluarte que fuiste,
diré noche a la voz y ausencia a las facciones,
y cuando te derrumbes sobre la tierra estéril
nombraré nulidad el rayo que te lleva.

Morir es un lugar que te agradaba. Vengo,
no obstante, eternamente por tu camino oscuro.
Destruyo tu deseo, tu forma y tu memoria,
pues soy el enemigo que no tendrá piedad.

Yo te nombraré guerra y tomaré
en ti las libertades de la guerra y tendré
en mis manos tu rostro oscuro y arrasado,
en mi pecho el lugar que alumbra la tormenta.

De Du mouvement et de l'immobilité de Douve, 1953.
Obra pictórica: Rothko. 
Versión de J.F.R.