Caos

Enso

Apenas tú, principio elemental de la policromía, dócil pájaro negro encaramado al cable, dominas la extensión de tu propia presencia, el canto residual que todas las mañanas actualiza el aire. Casi no te recuerda el paso inadvertido del proyectil dormido en su parábola; casi no te provoca la brizna que no crece en su lugar exacto. Trénzate, en la espiral común de tu bandada. Desaparece en todos. Cede al orden.

Publicado originalmente en Plural de habitación (2015).
Imagen —ensō— extraída de aquí

Coherencia del paisaje

Zhang Daqian

Solo en el árbol,
al pasar, se ha mezclado
la brisa con
el canto de los pájaros
y el óxido amarillo
de las hojas.

                      NNUna mujer azul, bajo su
sombra, saca un smartphone blanco del
bolsillo y busca una palabra en Internet, re-
visa sus mensajes y los borra, sin leerlos.
Todo a su alrededor parece disolverse: los
hombres y los niños se suceden sobre una
larga cinta de Moebius, y el cielo de la tarde
da lugar a ese fulgor rojizo en el que
mueren las estrellas. Yo, un caminante más
(o su apariencia), paso de largo y violo la
coherencia del paisaje.

Publicado originalmente en la revista Digo.Palabra.Txt.
Obra pictórica de Zhang Daqian, extraída de B-Sides.

Cuarta poesía vertical (1), de Roberto Juarroz

La vida dibuja un árbol
y la muerte dibuja otro.
La vida dibuja un nido
y la muerte lo copia.
La vida dibuja un pájaro
para que habite el nido
y la muerte de inmediato
dibuja otro pájaro.

Una mano que no dibuja nada
se pasea entre todos los dibujos
y cada tanto cambia uno de sitio.
Por ejemplo:
el pájaro de la vida
ocupa el nido de la muerte
sobre el árbol dibujado por la vida.

Otras veces
la mano que no dibuja nada
borra un dibujo de la serie.
Por ejemplo:
el árbol de la muerte
sostiene el nido de la muerte,
pero no lo ocupa ningún pájaro.

Y otras veces
la mano que no dibuja nada
se convierte a sí misma
en imagen sobrante,
con figura de pájaro,
con figura de árbol,
con figura de nido.
Y entonces, sólo entonces,
no falta ni sobra nada.

Por ejemplo:
dos pájaros
ocupan el nido de la vida
sobre el árbol de la muerte.

O el árbol de la vida
sostiene dos nidos
en los que habita un solo pájaro.

O un pájaro único
habita un solo nido
sobre el árbol de la vida
y el árbol de la muerte.

Barnett Newman's «Vir heroicus sublimis».

Extraído de Poesía vertical (Madrid: Cátedra, 2012).
Obra pictórica: Vir heroicus sublimis, de Barnett Newman (MoMA).